En un mundo donde los superhéroes son una parte integral de la sociedad, la vida cotidiana gira en torno a la presencia de personas con habilidades extraordinarias que protegen a los inocentes y mantienen el orden. La existencia de estos héroes es tan común que, incluso, sus hijos deben seguir sus pasos y enfrentar los mismos desafíos. Es en este contexto que nace Sky High, una escuela especial diseñada para entrenar a los hijos de los superhéroes y prepararles para su futuro en el mundo de los poderes extraordinarios.
Sky High es una institución única, construida en una gigantesca estructura suspendida en el aire, cuya misión es enseñar a los jóvenes a controlar y desarrollar sus habilidades, sin importar cuán impresionantes o inusuales sean. Los estudiantes son clasificados según sus aptitudes en dos categorías principales: los héroes y los sidekicks, una distinción que divide a los jóvenes en función de la fuerza o el impacto de sus poderes. A lo largo de su formación, los alumnos no solo aprenden a usar sus poderes, sino también a manejar la responsabilidad y las expectativas que conlleva ser parte de una familia de superhéroes.
Will Stronghold, hijo del legendario Comandante Stronghold y la veloz Josie Jetstream, es uno de los nuevos estudiantes que acaba de ingresar a Sky High. Al ser el descendiente de dos de los superhéroes más poderosos y respetados del mundo, se espera que Will tenga grandes habilidades desde el principio. Sin embargo, al comenzar sus clases, Will se enfrenta a una dura realidad: no tiene superpoderes. Mientras sus compañeros demuestran habilidades como la capacidad de volar, la fuerza sobrehumana o la manipulación de los elementos, Will parece ser el único estudiante sin nada especial.
Este inesperado desafío pone a prueba la autoestima de Will, quien se siente presionado por las expectativas de su familia y la sociedad. Su madre, Josie, siempre ha sido una heroína rápida y ágil, mientras que su padre, el Comandante Stronghold, es conocido por su invulnerabilidad y su capacidad para derrotar a cualquier enemigo. Sin embargo, Will no sabe qué hacer con su vida en un mundo que valora tanto los poderes extraordinarios, y teme no estar a la altura del legado de sus padres.
A medida que avanza el año escolar, Will debe aprender a lidiar con su falta de poderes y buscar su propio camino en un lugar donde la habilidad es la clave para el éxito. Además, debe enfrentarse a las dinámicas sociales de la escuela, donde los héroes y los sidekicks no se mezclan fácilmente, y donde algunos estudiantes parecen estar dispuestos a hacer todo lo posible para destacar, incluso a expensas de los demás.
Lo que Will no sabe es que su verdadero potencial va más allá de los poderes visibles y que, con el tiempo, descubrirá que su valentía, su ingenio y su determinación son los aspectos que realmente lo definen. Así, su viaje en Sky High se convierte en una lección no solo sobre encontrar su lugar en un mundo lleno de superhéroes, sino también sobre el valor de la autodefinición y el poder de la perseverancia.