
Han pasado cuatro años desde que el parque temático Jurassic World cerró sus puertas tras el catastrófico incidente que dejó a la isla Nublar sumida en el abandono. Desde entonces, sin presencia humana, la isla se ha convertido en un santuario salvaje donde los dinosaurios, criaturas traídas de la extinción por la ingeniería genética, deambulan libremente en su hábitat natural. La vida ha seguido su curso, pero una nueva amenaza pone en riesgo la existencia de estos majestuosos animales: un volcán inactivo comienza a mostrar signos de una inminente erupción.
Ante la inminencia del desastre natural, Claire Dearing, exgerente de operaciones de Jurassic World, ha transformado su vida y ahora lidera una organización dedicada a la preservación de los dinosaurios. Convencida de que estos seres merecen ser salvados, Claire organiza una arriesgada misión de rescate para trasladarlos a un lugar seguro antes de que la erupción arrase con todo.
Para llevar a cabo esta misión, Claire recurre a Owen Grady, un exentrenador de velociraptores y antiguo miembro del equipo del parque, quien mantiene un lazo emocional con Blue, una de las criaturas más inteligentes del recinto. Aunque al principio duda en involucrarse nuevamente, Owen acepta formar parte de la expedición, movido tanto por su sentido del deber como por la conexión especial que tiene con Blue.