«Ghostlight» es un thriller psicológico que teje una intrincada narrativa sobre la delgada línea entre la realidad y la ficción, el arte y la locura. La historia sigue a Jack, un actor de teatro en declive que, después de años de fracasos y frustraciones, recibe una última oportunidad para redimirse cuando es contratado para interpretar el papel principal en una nueva y ambiciosa obra que se estrenará en un teatro famoso, pero envejecido y plagado de leyendas.
El teatro, conocido por ser el escenario de eventos trágicos y misteriosos a lo largo de su historia, tiene su propia atmósfera inquietante. Se dice que está embrujado, y sus pasillos oscuros y camerinos desvencijados están llenos de ecos del pasado. La obra en sí tiene un trasfondo ominoso: fue escrita por un dramaturgo obsesionado con lo sobrenatural, quien desapareció en circunstancias extrañas poco después de terminar el guion.
A medida que Jack se sumerge en su papel, la línea entre su personaje y su propia identidad comienza a desdibujarse. Enfrentando su propio pasado plagado de arrepentimientos y fracasos, Jack comienza a experimentar extrañas visiones y fenómenos inquietantes dentro del teatro. A menudo, se siente observado, y el ambiente parece cobrar vida a su alrededor, reflejando su deterioro mental.
El director de la obra, un hombre excéntrico y controlador, presiona a Jack para que alcance un nivel de interpretación que lo lleva al límite. En cada ensayo, la intensidad aumenta, y Jack se ve cada vez más atrapado entre la realidad y la fantasía. Sus compañeros de reparto también comienzan a notar su comportamiento errático, pero nadie parece dispuesto a intervenir, temiendo que cualquier alteración en el proceso creativo podría arruinar la obra.
Mientras la fecha del estreno se acerca, los incidentes extraños en el teatro se intensifican. Luces que parpadean, puertas que se cierran solas, y susurros que parecen venir de las sombras atormentan a Jack, quien empieza a cuestionar su cordura. Los fantasmas del pasado, tanto reales como imaginarios, lo persiguen, y Jack se convence de que el teatro está tratando de consumirlo.
La obra finalmente se estrena, pero la actuación de Jack es tan inmersiva y perturbadora que algunos miembros del público y del elenco no pueden distinguir si lo que están viendo es una actuación o una verdadera manifestación de locura. En el clímax de la obra, un acontecimiento trágico sacude a todos: Jack, completamente atrapado en su personaje, parece haber perdido todo contacto con la realidad, llevando el desenlace de la obra a un punto de no retorno.
«Ghostlight» culmina con un final abierto que deja al público preguntándose si el teatro realmente estaba embrujado, si Jack sucumbió a la locura, o si la obra fue una experiencia tan intensa que desató algo más oscuro dentro de él. Es un relato inquietante sobre la obsesión, el miedo y el peligro de perderse en las sombras de uno mismo, ofreciendo una reflexión sombría sobre los límites del arte y la mente humana.
