
Lo que debía ser un fin de semana de lujo y diversión junto al lago se convierte en una pesadilla para Iris y su grupo de amigos cuando el multimillonario dueño de la mansión es hallado muerto en circunstancias sospechosas. Lo que al principio parece un accidente pronto desata una ola de paranoia: ¿fue un suicidio o alguien entre ellos lo asesinó?
Desde su llegada, Iris siente que algo no está bien en la imponente propiedad. Aislados por el bosque, sin señal telefónica y con una tormenta aproximándose, los jóvenes se ven atrapados en un juego de secretos y desconfianza. Viejas rencillas resurgen, pasiones ocultas quedan al descubierto y cada revelación fragmenta aún más los lazos que los unían. Pero lo peor está por venir: alguien los está observando.
Mientras la tensión crece y el peligro se vuelve inminente, Iris se aferra a su instinto para descubrir la verdad. Cuanto más indaga, más claro le queda que el magnate tenía enemigos más cerca de lo que cualquiera imaginaba. Y cuando finalmente el misterio se desentraña, el grupo se enfrenta a una decisión imposible: encubrir lo sucedido o asumir las consecuencias.