
En un mundo donde las películas taquilleras y las sagas de fantasía sirven de inspiración para las más disparatadas parodias, cuatro adultos huérfanos se embarcan en una aventura tan absurda como inolvidable. Esta historia, que mezcla elementos de cine popular con un tono cómico irreverente, lleva a sus protagonistas por escenarios imposibles y situaciones disparatadas, todo con el objetivo de ofrecer una parodia divertida y crítica del cine contemporáneo.
La aventura comienza cuando estos excéntricos personajes son invitados a recorrer una misteriosa y extravagante fábrica de chocolates, dirigida por un confitero tan peculiar como excéntrico. El lugar, lleno de colores vibrantes, máquinas imposibles y dulces de apariencia mágica, es solo el inicio de un viaje que desafía la lógica y la coherencia narrativa, como corresponde a toda buena parodia.
Pronto, los protagonistas se ven transportados a un reino mítico, que claramente hace eco de las tierras encantadas de las grandes sagas literarias y cinematográficas. En este nuevo mundo, poblado por criaturas fantásticas y gobernado por reglas tan ridículas como fascinantes, conocen a un león muy particular. Este no es el típico rey noble y sabio: aunque posee una gran inteligencia, también tiene una personalidad lujuriosa y desenfadada, lo que añade un componente provocador a la historia.