
Tobin Vance, una de las figuras más polémicas del mundo de la autoayuda, ha vuelto a la escena, aunque no precisamente bajo los reflectores. Tras haberse exiliado en el Reino Unido para evitar un posible arresto por sus actividades comerciales poco transparentes en Estados Unidos, el llamado «gurú de la transformación personal» está organizando una nueva serie de retiros espirituales en completo secreto.
Vance, que durante años lideró una multimillonaria industria basada en seminarios motivacionales, libros de crecimiento personal y retiros de alto costo, cayó en desgracia luego de múltiples denuncias por fraude, manipulación psicológica y evasión fiscal. Antes de que las autoridades pudieran hacer efectivas las órdenes de arresto, desapareció del ojo público y reapareció al otro lado del Atlántico.
Lejos de abandonar su estilo mesiánico y su influencia sobre seguidores incondicionales, Vance ha encontrado una forma de continuar con su obra, aunque bajo nuevas condiciones. Ahora opera desde locaciones rurales y discretas del Reino Unido, donde organiza retiros intensivos dirigidos a un círculo más cerrado de fieles. Para llevar a cabo esta operación, cuenta con el apoyo de Elizabeth, una asistente recién incorporada a su equipo, y John, uno de sus más leales acólitos.