
Tom Baker siempre ha soñado con entrenar a un equipo de fútbol americano de alto nivel. Como padre dedicado y amante del deporte, ha construido una vida estable en un pequeño pueblo de Illinois junto a su esposa, Kate, y sus numerosos hijos. En este entorno tranquilo, la familia ha encontrado la estabilidad y la unión que los caracteriza. Sin embargo, cuando Tom finalmente recibe la oportunidad de su vida, la familia se enfrenta a una decisión difícil: mudarse a una gran ciudad y adaptarse a una nueva realidad.
El traslado trae consigo una serie de desafíos que afectan a todos los miembros de la familia. Para los hijos, acostumbrados a la calidez de su comunidad, la adaptación a nuevas escuelas y círculos sociales se convierte en un reto emocional. La nostalgia por el hogar que dejaron atrás y la incertidumbre del cambio ponen a prueba su capacidad de resiliencia. Mientras tanto, Tom, inmerso en su nuevo rol como entrenador, se encuentra atrapado entre su pasión profesional y la responsabilidad de ser un padre presente. Su trabajo exige tiempo y esfuerzo, lo que genera tensiones dentro del hogar y lo obliga a replantear sus prioridades.
Kate, como madre y compañera incondicional, asume el papel de pilar emocional de la familia. Aunque su prioridad es mantener la armonía en el hogar, también debe enfrentarse a sus propias aspiraciones y deseos personales. El desafío de equilibrar la crianza de sus hijos con sus propias metas la lleva a cuestionarse sobre su identidad más allá del rol materno. A medida que la familia intenta ajustarse a su nueva vida, los malentendidos y situaciones caóticas se convierten en el pan de cada día, poniendo a prueba su capacidad para mantenerse unidos a pesar de las dificultades.