
Lo que parecía una emocionante salida entre amigos se convierte en el inicio de una pesadilla cuando Nick O’Bannon asiste con su grupo a una carrera de Nascar en un concurrido circuito. El ambiente es eléctrico, lleno de emoción y adrenalina, hasta que algo inusual sucede: Nick experimenta una vívida visión de un trágico accidente. En esta aterradora premonición, un brutal choque múltiple en la pista desata el caos en el estadio, cobrando la vida de decenas de personas, incluidos él y sus amigos.
Atónito y confundido, Nick reacciona con urgencia tras salir de su visión y logra convencer a Lori, su novia, y a otros asistentes de abandonar el recinto. Momentos después, el escenario que visualizó se vuelve realidad. Gracias a su advertencia, él y un reducido grupo de doce personas logran escapar de una muerte segura. Lo que parece un milagro rápidamente se torna en algo más oscuro y angustiante.
El alivio inicial por haber sobrevivido al desastre se desvanece cuando los supervivientes comienzan a morir uno a uno, en circunstancias extrañas y violentas. Nick pronto se da cuenta de que no se trató simplemente de una coincidencia ni de un golpe de suerte. Ha roto una especie de «orden natural», y la muerte, como fuerza implacable, regresa para reclamar lo que le pertenece.