
Lo que comenzó como una escapada tranquila al corazón del bosque se convierte rápidamente en una pesadilla para Fonda y su grupo de amigos. Buscando desconectarse del ajetreo de la ciudad y disfrutar de unos días de paz rodeados por la naturaleza, los jóvenes no imaginaban que el aislamiento del lugar escondería horrores que pondrían sus vidas en peligro.
A medida que el grupo se adentra en el espeso bosque, comienzan a percibir que algo no anda bien. Ruidos extraños, sombras que se mueven entre los árboles y la constante sensación de ser observados comienzan a perturbar la calma. No pasa mucho tiempo antes de que descubran la aterradora verdad: el bosque está habitado por salvajes mutantes, seres deformes y violentos que viven ocultos y que no dudarán en atacar a cualquier intruso que invada su territorio.
Paralelamente, en un punto no muy lejano del bosque, un grupo de prisioneros extremadamente peligrosos es trasladado de una prisión de alta seguridad. Sin embargo, el transporte es interceptado y atacado, lo que permite que varios reclusos logren escapar. La situación rápidamente se sale de control, y ahora, además de lidiar con los mutantes, Fonda y sus amigos se ven atrapados en medio de una cacería humana, perseguidos por criminales dispuestos a todo para mantenerse libres.