
En un mundo no muy lejano, el tiempo ya no es una línea recta. La película Looper, un thriller de acción con tintes de ciencia ficción, plantea un futuro inquietante en el que el viaje en el tiempo se convierte en una realidad… pero con una salvedad: es ilegal y opera exclusivamente en los bajos fondos del crimen organizado.
La historia se sitúa en el año 2044, una sociedad en decadencia donde la tecnología ha avanzado lo suficiente como para permitir el transporte de personas a través del tiempo. Sin embargo, este avance no es utilizado para el bien común ni para explorar los misterios del universo, sino como un método infalible para eliminar enemigos sin dejar rastro. La mafia del futuro, siempre un paso por delante de la ley, ha encontrado una forma perfecta de desaparecer a sus víctimas: las envía 30 años al pasado, donde asesinos a sueldo conocidos como “loopers” se encargan del trabajo sucio.
Joe, interpretado por Joseph Gordon-Levitt, es uno de esos loopers. Frío, eficiente y bien remunerado, vive cómodamente gracias a su participación en este sistema perverso. Cada misión le llega sin previo aviso: una persona aparece de repente, atada y con una bolsa en la cabeza. Joe aprieta el gatillo, se deshace del cuerpo, y cobra su recompensa en lingotes de plata. Para él, es solo rutina.