En 1979, un grupo de jóvenes cineastas decide emprender la producción de una película para adultos en una aislada zona rural de Texas. Su objetivo es llevar a cabo su proyecto en un ambiente apartado, buscando privacidad y discreción para evitar cualquier tipo de interferencia. Sin embargo, lo que inicialmente parecía ser una aventura excitante y prometedora se convierte rápidamente en una pesadilla cuando los anfitriones de la casa, una pareja de ancianos solitarios, descubren la verdadera naturaleza de lo que están haciendo.
A medida que la tensión crece, los jóvenes se dan cuenta de que no solo se enfrentan a una invasión de su intimidad, sino que la situación escala a algo mucho más peligroso. Los ancianos, lejos de ser simples testigos sorprendidos, se muestran cada vez más hostiles y peligrosos. La casa, que en un principio parecía un refugio aislado, se convierte en una prisión mortal, y los cineastas pronto se ven atrapados en una lucha por sobrevivir. La tranquilidad rural se convierte en el escenario de una persecución brutal y despiadada, donde la vida de los jóvenes está en juego.
A lo largo del relato, los personajes deben enfrentarse no solo al terror físico y psicológico de ser perseguidos por los ancianos, sino también a sus propios miedos y conflictos internos. La distancia con el mundo exterior y la incapacidad de pedir ayuda hacen que cada decisión sea crucial para su supervivencia. Lo que parecía ser un simple rodaje se transforma en un enfrentamiento desesperado contra el tiempo y contra unos anfitriones que no dudan en emplear métodos extremos para proteger su secreto y satisfacer sus inquietudes.
La película se convierte en una lucha por escapar, por mantenerse con vida y, sobre todo, por descubrir las aterradoras razones detrás de la violencia de los ancianos. En el proceso, los cineastas se ven obligados a cuestionar no solo su propia moralidad, sino también el precio de sus sueños y ambiciones en un entorno lleno de sorpresas mortales.