En un pequeño pueblo de Inglaterra, en 1575, William se embarca en una desesperada misión para salvar a su esposa, Twyla, quien ha sido injustamente acusada de brujería. Con la amenaza de una condena a muerte sobre ella, William se ve obligado a encontrar a la verdadera bruja que acecha al pueblo, con la esperanza de probar la inocencia de Twyla y evitar su trágico destino.