
En el oscuro mundo del crimen organizado, pocos nombres inspiran tanto temor como el de Zee, una asesina a sueldo cuya reputación le ha valido el apodo de “la Reina de los Muertos”. Su precisión letal y frialdad la han convertido en una figura implacable, temida por enemigos y aliados por igual. Sin embargo, detrás de esa imagen de violencia y muerte, se esconde una historia marcada por una inesperada lucha interna que cambiará el rumbo de su vida para siempre.
Zee, acostumbrada a cumplir sus contratos sin cuestionamientos, recibe la orden de eliminar a una joven ciega. Algo en esta misión despierta en ella una empatía desconocida y un conflicto moral que nunca antes había experimentado. En un giro radical, decide no cumplir con el encargo y proteger a la muchacha, una acción que desata una cadena de consecuencias que ponen en riesgo su propia vida.
Al romper las reglas de su mundo, Zee se convierte en objetivo tanto de sus antiguos colegas criminales, quienes ven su acto como una traición intolerable, como de un obstinado detective de policía que se encuentra en medio de la búsqueda. Este oficial, determinado a capturar a la asesina, representa para Zee otro peligro, pero también una posibilidad de redención, aunque sea a través de la confrontación y la huida constante.
La joven ciega, cuya vida estaba en juego, emerge como un símbolo de esperanza y humanidad en medio de un entorno de violencia y oscuridad. La relación entre Zee y la joven evoluciona a medida que la asesina descubre un lado de sí misma que creía perdido o inexistente. Esta conexión inesperada desafía los límites de la dureza y la indiferencia que definieron su existencia hasta ese momento.