
En la colorida y extravagante comedia deportiva Semi-Pro, Will Ferrell da vida a Jackie Moon, un personaje tan ambicioso como excéntrico. Moon no es solo el alma del equipo Flint Michigan Tropics, sino también su propietario, entrenador y jugador estrella, lo que ya anticipa el tono desenfadado y caótico de esta historia ambientada en los años setenta. Con una personalidad arrolladora y un estilo más cercano al espectáculo que al deporte de alto nivel, Jackie representa a la perfección el espíritu rebelde y teatral de la American Basketball Association (ABA), una liga real que en su momento rivalizó brevemente con la NBA.
Jackie Moon no se conforma con ser una figura local carismática; su verdadero sueño es llevar a su modesto equipo a la cima, concretamente a la National Basketball Association (NBA), en un momento en el que ambas ligas están considerando una fusión. Sin embargo, los Flint Tropics están lejos de ser una franquicia ganadora: su rendimiento en la cancha es mediocre y su afición, escasa. Pese a todo, Jackie se niega a rendirse. Decidido a no quedar fuera de la historia, hará lo impensable para que su equipo tenga una oportunidad real de unirse a la liga más prestigiosa del mundo.