
Santo en el museo de cera (1963) es una película mexicana de culto que fusiona ciencia ficción, acción y terror en una aventura protagonizada por el legendario luchador El Santo. Dirigida por Alfonso Corona Blake y Manuel San Fernando, esta cinta retoma el concepto clásico del museo de cera con un giro tenebroso y muy al estilo del cine fantástico mexicano de los años 60.
La historia sigue a El Santo mientras investiga una serie de desapariciones ligadas a un misterioso museo de cera. Lo que comienza como una visita común a una exposición, pronto se convierte en una pesadilla cuando descubre que las figuras del museo esconden un oscuro secreto: están hechas a partir de personas reales, transformadas por un científico loco que busca la inmortalidad. A medida que el héroe enmascarado se adentra en los pasillos del museo, se enfrenta a trampas, monstruos y experimentos perversos, todo mientras lucha por desmantelar la siniestra operación.
Con una duración de 1 hora y 32 minutos, esta película combina elementos clásicos del cine de terror con la acción característica de las cintas del Santo. Santo en el museo de cera se ha convertido en una pieza fundamental del cine de culto mexicano, destacando por su atmósfera macabra, estética retro y narrativa única.