
En la última entrega de la exitosa saga Rápidos y Furiosos, la lealtad y la familia se ponen a prueba como nunca antes. Dominic Toretto (Vin Diesel) ha dejado atrás su vida de riesgo para disfrutar de una aparente paz junto a Letty (Michelle Rodriguez). Con Brian y Mia alejados de la acción y el equipo finalmente exonerado, todo parece indicar que los días de persecuciones y peligros han quedado en el pasado.
Sin embargo, la calma se desvanece cuando aparece Cipher (Charlize Theron), una criminal brillante y despiadada que arrastra a Dom de regreso al mundo del crimen. Con un plan meticulosamente orquestado y una oferta imposible de rechazar, Cipher logra lo impensable: convertir a Toretto en el enemigo de su propia familia.
El equipo, incrédulo ante la traición de su líder, se ve obligado a enfrentarse a él. Letty, Roman (Tyrese Gibson), Tej (Ludacris) y el resto de la pandilla deben unirse para descubrir qué oculta Dom y cómo sacarlo del control de Cipher antes de que sea demasiado tarde. Pero esta vez, la amenaza no es un forastero, sino uno de los suyos, y detenerlo podría significar el mayor reto de sus vidas.