
Heidi es una entrañable historia que ha tocado los corazones de generaciones enteras con su ternura, su mensaje de amor por la naturaleza y la fuerza de los lazos familiares. La protagonista es una niña suiza de ocho años, huérfana desde temprana edad, que vive bajo el cuidado de su tía Dete. Sin embargo, la vida de Heidi da un giro inesperado cuando su tía decide dejarla al cuidado de su abuelo, un hombre solitario y un tanto huraño que vive en una cabaña en las montañas de los Alpes suizos.
A pesar de la fama de ser un hombre distante, el abuelo de Heidi pronto se encariña con la pequeña, y juntos comienzan una vida sencilla pero feliz en plena naturaleza. Rodeada de prados verdes, aire puro y animales del campo, Heidi florece. Su dulzura, alegría y espíritu libre llenan de vida la montaña y ablandan el corazón de su abuelo, quien hasta entonces había vivido alejado del mundo.
Pero la paz de Heidi no dura mucho. Su tía reaparece inesperadamente para llevarla a Frankfurt, Alemania, con la excusa de darle una mejor educación y más oportunidades. En realidad, la lleva para que haga compañía a Klara Sesemann, una niña rica que, a pesar de tener todo lo material, vive confinada en una silla de ruedas y en una gran casa donde la calidez emocional brilla por su ausencia.
Aunque la vida en Frankfurt es muy diferente, Heidi se esfuerza por adaptarse. Sin embargo, extraña profundamente la libertad de la montaña y la presencia amorosa de su abuelo. Su espíritu comienza a apagarse poco a poco, afectando incluso su salud. A pesar de su descontento, Heidi logra entablar una hermosa amistad con Klara, y su alegría natural trae algo de luz a la vida de la niña enferma.