Cuatro semanas después de la propagación de un misterioso e incurable virus que arrasó el Reino Unido, un pequeño grupo de supervivientes lucha por encontrar un refugio seguro. La pandemia ha transformado radicalmente la vida tal como se conocía, despojando a las ciudades de su vibrante actividad y convirtiendo el paisaje urbano en un territorio desolado y peligroso.
El virus, que se esparció rápidamente y sin previo aviso, no solo afectó a la salud física de los ciudadanos, sino que también trastornó el orden social. Las instituciones colapsaron, las calles se vaciaron y los servicios de emergencia no pudieron hacer frente al desastre. En medio de este caos, los infectados se convirtieron en una amenaza constante, y el miedo al contagio obligó a los pocos sobrevivientes a mantenerse alejados de cualquier contacto humano.
Entre los sobrevivientes se encuentran personajes de diversas circunstancias, cada uno con sus propios temores, esperanzas y habilidades. Unidos por la necesidad de encontrar refugio, forman una frágil alianza en un mundo donde la confianza es un lujo que pocos se pueden permitir. A medida que recorren un país devastado, se enfrentan no solo a los peligros del virus, sino también a las tensiones que surgen entre ellos debido a la escasez de recursos, la desesperación y el conflicto moral sobre las decisiones que deben tomar para garantizar su supervivencia.
El grupo se ve constantemente acosado por la amenaza de los infectados, quienes parecen ser cada vez más agresivos y difíciles de evitar. Sin embargo, la mayor amenaza puede ser la naturaleza humana misma, pues la supervivencia en tales condiciones extremas puede llevar a las personas a cuestionar hasta qué punto están dispuestas a mantener su humanidad.