
En el mundo de los negocios, William Parrish lo tiene todo: riqueza, poder, prestigio y una familia que lo admira. Es un magnate meticuloso, un hombre cuya vida ha sido cuidadosamente construida a base de decisiones firmes y un enfoque racional ante cualquier circunstancia. Sin embargo, lo que no puede anticipar es que su mayor desafío no vendrá de una junta directiva ni de una caída del mercado, sino de una visita inesperada y sobrenatural que lo obligará a enfrentarse cara a cara con su propia mortalidad.
Todo comienza cuando un joven enigmático, apuesto y de modales refinados aparece en la vida de los Parrish. Su nombre es Joe Black, pero tras esa fachada humana se oculta nada menos que la personificación de la Muerte. Su misión es simple en apariencia: acompañar a William en el proceso de dejar este mundo. Pero antes, Joe quiere experimentar la vida humana, comprenderla, saborearla. Y qué mejor guía que alguien como Parrish, que ha conocido el éxito, el amor, la familia y el paso del tiempo.
Lo que Joe no esperaba era enamorarse de Susan, la hija de William. Este vínculo complica su propósito, pues por primera vez, la Muerte se ve confrontada con sentimientos humanos auténticos: el deseo, la ternura, el dilema moral. ¿Puede alguien como él, eterno y ajeno al tiempo, interferir con la vida por amor? ¿Tiene derecho a alterar el curso de los acontecimientos humanos?
«¿Conoces a Joe Black?» no es solo un drama romántico con tintes fantásticos, sino también una profunda reflexión sobre el sentido de la vida, la fugacidad del tiempo y la inevitabilidad del final. La película plantea interrogantes universales: ¿qué haríamos si supiéramos que nuestros días están contados? ¿Cómo viviríamos si tuviéramos la oportunidad de ver el mundo desde los ojos de alguien que nunca ha sentido el calor de una caricia o el vértigo del enamoramiento?