
En la narrativa, un grupo de animales depende anualmente de la inundación que ocurre en su hábitat, un fenómeno que les proporciona agua y alimento, esenciales para su existencia. Sin embargo, este año descubren con sorpresa y preocupación que los humanos han intervenido en su entorno natural para construir una presa, desviando el agua con fines comerciales y recreativos. Este acto de explotación pone en peligro la supervivencia de numerosas especies, lo que lleva a los animales a tomar una decisión drástica.
Cansados de ser víctimas de la creciente destrucción de sus ecosistemas, los animales organizan una conferencia con el objetivo de unir fuerzas y buscar una solución a este problema. En esta reunión, representantes de diversas especies, desde aves hasta mamíferos acuáticos, discuten el impacto devastador que la construcción de la presa tendrá sobre su forma de vida y el futuro de su hábitat. La indignación es palpable, pero también lo es la determinación de encontrar una forma de luchar por lo que les pertenece.
La historia, aunque inspirada en un contexto ficticio, refleja una realidad cada vez más presente en nuestro mundo: la lucha por la supervivencia de los seres vivos frente a las decisiones humanas que anteponen los intereses económicos a la preservación de la naturaleza. La obra invita a reflexionar sobre la importancia de la conservación del medio ambiente y la necesidad de cambiar nuestra relación con el entorno natural.